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Un talento de primera división, adorado por los lectores de histor ietas de paladar refinadamente bizar ro (busquen en las librerías su Billy Avellanas, editado por La Cúpula), ingresa con todos los honores en la escudería Adult Swim: Tony Millionaire. Con la complicidad de Eric Kaplan, uno de los puntal es de Futurama, Millionaire convierte el delirium tremens en fuente de inspiración estética para contar las surreales peripecias de Drinky Crow, un cuervo borracho, y un mono irlandés en un océano sacado de un libro de aven turas del siglo XVIII. They Might Be Giants firman la irresistible sintonía.

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Habrá quien piense que todo esto de Adult Swim está muy bien, pero que la anima ción limitada tiene, en fin…, sus límites. Para ellos está especialmente diseñada esta serie de Christy Karacas, Stephen Warbrick y Ben Gruber, que logra her manar una radicalidad gráfica estilo Gary Panter con la fluidez de la animación lisérgica de un Vince Collins. Una prisión superpoblada situada en el interior de un volcán es el repetido escenario de las climáticas y san guinolentas escabechinas que cierran cada episodio, permitiendo la huída del prota gonista, Jacknife, que sólo se comunica con gruñidos

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Una albóndiga, un batido y una ración de patatas fritas comparten casa en New Jersey junto a la residencia de un torrentiano vecino adicto a la pornografía. En un buen principio, los personajes nacieron como im probable grupo de superhéroes, pero sus creadores -Dave Willis y Matt Maiellaro- decidieron aban donarles muy pronto en la tierra de nadie de la inacción, la chorrada y el diálogo enervante (con frecuencia improvisado en la misma sala de dobla je). Tuvieron su película en 2007 (Aqua Teen Hunger Force Colon Movie for Theaters) y anun cian nueva aventura cinematográfica para 2011

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Una albóndiga, un batido y una ración de patatas fritas comparten casa en New Jersey junto a la residencia de un torren tiano vecino adicto a la porno grafía. En un buen principio, los personajes nacieron como improbable grupo de superhéroes, pero sus creadores -Dave Willis y Matt Maiellaro- decidieron abandonarles muy pronto en la tierra de nadie de la inacción, la chorrada y el diálogo ener vante (con frecuencia improvisado en la misma sala de doblaje). Tuvieron su película en 2007 (Aqua Teen Hunger Force Colon Movie for Theaters) y anuncian nueva aventura cinematográfica para 2011

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Uno de los clásicos de Adult Swim. Frenética coctelera de referentes de una cultura popular mutante, este programa que anima con desa liñado desparpajo juguetes y muñecos articulados surge de la unión de las en febrecidas mentes de Matthew Senreich y Seth Green (es decir, el hijo del Dr. Maligno de la saga Austin Powers). Todo es posible en un episodio de Robot Chicken: desde una reescritura de Kill Bill con Jesucristo ocupando el lugar de Uma Thurman hasta un Gran Hermano protagonizado por superhéroes. El mismísimo George Lucas prestó su voz en un epi sodio con sagrado a su saga galáctica.la carisacisternavettonesasturesiberoscanchotartesios
alicantecementerioverracocastillejoshispaniasigillatacasaresvetton
celtiberoscastrexapalaciopintiahallazgomomiasarrubal
chiclanasimposiosmonstruo

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El perfecto revulsivo para quienes quieran aca bar de una vez por todas con la nostalgia de Johnny Quest, la clásica serie de Hanna Barbera de mediados de los sesenta en la que un niño, su hermano indio adoptivo, el padre cien tífico de ambos, la mascota de la fami lia y el matón que velaba por todos recorrían el mundo resolviendo enigmas. Aquí sobreviven los arquetipos, pero con venientemente alterados: Hank y Dean son los cenutrios hijos del Dr. Thaddeus Rusty Venture, una mala bestia que no duda en extirpar les los riñones para resarcirse de un mal encuentro con las mafias de tráfico de órganos.

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Dethklok es la última palabra en death metal en un futuro apoca líptico que no podrían ni haber imaginado los miembros de Spinal Tap en sus peores pesa dillas. Creada por Brendon Small y Tommy Blacha, la serie coge la mística del metal para mutarla en hipérbole de humor bestia y sangriento: antes de asistir a uno de sus conciertos, los fans del grupo se ven obliga dos a firmar un contrato que exime a la discográfica de toda responsa bilidad en caso de masivo exterminio de la audiencia. Su humor no es en absoluto sutil: el objetivo es desatar un Armaggedon de atronadoras carcajadas, sin filtros

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Podría provocarle sarpulli dos satán icos a monseñor Rouco Varela, o bien podría convertirse en su serie favorita. Dino Stamatopoulos -un corredor de fondo de la comedia excéntrica que ha trabajado para Ben Stiller y David Letterman, entre otros- recurrió a la amable animación en plastilina para crear al personaje más agresivamente puritano en la historia de la anima ción: Moral Orel, adorable niño protestante de la América profunda, hará lo imposible por estar cada vez más cerca de Dios, transitando por los caminos del racismo, la homo fobia y otras formas de la dulce intolerancia.

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La des cendencia pospunk de los clásicos Osos Monta ñeses de Hannah Barbera. Con el trazo sucio y esquinado de un niño borracho, la serie documenta las andanzas de los Cuyler, una familia de calamar es paletos de las región de los Apalaches que reparte su tiempo entre trabajos basura, condenas carcelarias, sexo sucio y arrebatos de violencia. La relación entre el sheriff de la localidad -al que da voz Charles Napier, actor fetiche de Russ Meyer- y el papá calamar Early Cuyler demuestra que la amistad puede sobrevivir a las más sanguinarias mutila ciones. La banda sonora es extraordinaria

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Más cerca del aguafuerte en movimiento que de la anima ción posmoderna, este primer retoño español de Adult Swim reajusta la poética de Los olvidados, de Luis Buñuel, a la era YouTube. Con banda sonora de un histórico de la electrónica local -Miguel A. Ruiz, alias Orfeón Gagarin-, las voces de Andrés Gertrudix y Venga Monjas -revolucionario tándem cómico barcelo nés- y el áspero diseño visual de La Camorra y Darío Adanti, Putokrío cuenta, en precisas minia turas de negrísimo humor, las andanzas de un asilvestrado preadolescente en un dis funcional universo sin aparente futuro a la vista.La Nona, de CossaCamino del CidMarisa AzuaraEl AristocrataLa lotería del diabloPlaneta 54Devoradores de cadaveresMillonario por cinco minutosAntiguedadesConvenios de ginebraGuatemala la utopiaPeligro en el MediterraneoEl mayordomoLas leyes de la vidaArqueometroAlgoritmos